
Grecia, oficialmente la República Helénica (en griego: Ελληνική Δημοκρατία), es un país del sureste de Europa que forma parte de la Unión Europea (UE).
Situado en el lado sur de la Península Balcánica, limita con Bulgaria, la Antigua República Yugoslava de Macedonia y Albania al norte, al este con Turquía y al oeste y sur con el Jónico y el Mediterráneo.
Etimología
Grecia: proveniente del término latino graecus (Γραικοί), forma como Aristóteles se refería al nombre del país. En realidad el nombre está relacionado con el de la gente de Epiro. Otro nombre que recibe está relacionado al término de Alejandro Magno, “Helénico”, que proviene de Ellada (Ελλάδα) y que significa ‘tierra ligera’. También se relacionó al país griego con helios (sol). La raíz de donde se formó realmente su nombre no es muy certera, pero es en el Imperio romano donde comienzan a llamarle Grecia.
Historia
Artículo principal: Historia de Grecia
Lugares y Pueblos
La civilización griega se extendió hasta las islas del mar Egeo, la costa oriental del Egeo, las costas meridionales en torno de los mares Adriático y Tirreno y muchos sitios costeros alrededor de toda la cuenca mediterránea. Luego con las conquistas de Alejandro Magno se extenderían hacia el Oriente. Grecia es una civilización secundaria del segundo grado, surgió en curso de la época de las tinieblas griegas que abarcan desde el desastre de la cultura micénica (siglos XII a [[siglo XI a. C. XI a. C.). Grecia estaba compuesta por varias culturas como los Jonios, Dorios y Eolios.
Civilización Minoica
Es la primera civilización del mundo griego que florecía en la isla de Creta. Sus habitantes se establecieron hacia el año 6000 a. C. y alcanzaron el máximo de esplendor entre el año 2000 y el 1450 a. C. Contaban con una abundante riqueza la cual provenía del comercio con otras ciudades de la edad de bronce. También esta riqueza provenía de fértil suelo de Creta que producía aceites, cereales y vino en abundancia. Toda esta economía se centraba en los ricos palacios. Estos palacios se caracterizaban por estar decorados con escenas pintadas llamadas «frescos», todos estos palacios se construyeron cerca del mar, los restos de los lujosos edificios evidenciaban la técnica de los minoicos.
Civilización Micénica
Grecia disponía en la Edad de Bronce de centros importantes entre ellos Micenas. El rey vivía en grandes palacios con que desempeñaban el papel de cuartel general militar y centro administrativo. El pueblo micénico se caracterizó por su maestría en el comercio marítimo. Alcanzaron su cenit sobre el año 1600 a. C., y poco a poco fueron decayendo hasta la invasión de los aqueos.
Civilización Griega
No es fácil delimitar la civilización griega ni en cuanto a espacio ni en tiempo. El desarrollo de la cultura griega se podría dividir en tres fases: la Arcaica, la Clásica y la Helenística. En este curso histórico surgieron varios hechos importantes y fundamentales en la formación definitiva de lo que fue Grecia posteriormente: la formación de las dos polis (ciudades), el siglo V, la Edad Ateniense, las guerras como Médicas o la del Peloponeso (cinco años después de la cual se trataron de modificar las ciudades estados), La preeminencia de Macedonia (con Filipo II y su hijo, Alejandro Magno) y la extensión por Asia del mundo helenístico. La dominación romana en el siglo II a. C. pondría punto final a la civilización Griega políticamente, pero dejaría una impronta indeleble en sus invasores a través de los siglos.
Síntesis histórica
«De la época de las tinieblas a las polis». Esta época corresponde al surgimiento de Grecia como civilización (siglo XI al siglo IX a. C.), en el curso del siglo X se produjo un proceso de urbanización en el cual se trataba de agrupar varias aldeas hasta llegar a formar ciudades como Esparta y Atenas. La organización interna socio-política de estas primitivas polis estaba dominada por las tribus Ethnos (junto a los hogares clanes y fraternidades). Estas ciudades estado eran gobernadas por reyes que ejercían la autoridad religiosa, militar y política, excepto Esparta ya que hasta cierto grado la autoridad de los reyes empezó a ser reemplazada por una autoridad aristocrática formada por terratenientes que podían criar mantener y montar sus caballos. Otros dos factores que formaron un papel fundamental en la formación de la civilización griega fueron la institución de los juegos panhelénicos como los juegos olímpicos, comenzados en los años 776 a. C. los cuales subrayan los rasgos comunes de los griegos y las dos epopeyas de Homero probablemente compuesta en el siglo VIII a. C. El siglo VIII a. C. fue un periodo revolucionario para la formación de la civilización griega ya que asistimos a la introducción del alfabeto fenicio y su adaptación a la lengua griega, se mejoraron también la metalurgia del hierro y las técnicas agrícolas; esto produjo como resultado el aumento de la población lo cual genero necesidades como la fundación de colonias. Estas colonias enviaban metales y alimentos a sus metrópolis e importaban a cambio productos ya terminados. Esta prosperidad comercial, entre otros factores, condujo a la rápida fundación de las ciudades estado griegas por la costa del Egeo y sus islas (a finales de ese siglo ya había más de 700 ciudades-estado).Ésta riqueza avivó cada vez más las ansias de independencia política de las colonias respecto a sus metrópolis, no siempre por la vía pacífica lo que originó la creación de ejércitos y técnicas militares perfeccionadas como la infantería pesada (los hoplitas), que reemplazaron a los anteriores ejércitos de caballería. A modo general puede decirse que en los siglos VIII al VI a. C., las polis griegas experimentaron una transición de un sistema de gobierno monárquico a uno aristocrático. En el curso de las crisis sociales de los siglos VII y VI a. C. pasaron por una serie de gobiernos dictatoriales (los tiranos) hasta llegar finalmente a unos gobiernos democráticos. Esparta siguió un curso distinto por que conservo su doble monarquía, y después de la segunda guerra desarrolló una organización militar que llego a caracterizarlo a futuro.
Período prehelénico
Guerras Médicas
Artículo principal: Guerras Médicas
Entre los años 499 al 478 a. C., Grecia se enfrentó a una gran amenaza, los persas. Durante mucho tiempo Persia fue una amenaza principalmente en los territorios del Asia Menor, estas guerras transcurrieron bajo dos reinados persas, el de Darío I y el de Jerjes (hijo de éste). Esta guerra se desarrolló en dos partes, teniendo como resultado la victoria de las polis griegas, gracias en parte a sus desarrollados navíos:
La Primera Guerra Médica, en la que tuvo lugar la Batalla de Maratón.
La Segunda Guerra Médica, en la que acontecieron la Batalla de las Termo pilas y la de Salamina.
La Confederación Ateniense y el Siglo de Pericles
Artículo principal: Siglo de Pericles
Para proseguir la lucha marítima contra el Imperio persa, Atenas organizó la Confederación Ateniense o Liga de Delos (477 a. C.), y a partir de entonces dominó el comercio marítimo del mundo colonial griego. Atenas se convirtió además en un centro político e intelectual, cuyo período de mayor esplendor correspondió al gobierno de Pericles, fundamentalmente desde 462 a. C. hasta 429 a. C., en el que su influencia política se dejó sentir con intensidad. En política interior, Pericles modificó las leyes, dándoles un sentido más democrático, estableció la retribución de los cargos públicos y reconstruyó la ciudad, muy dañada a consecuencia de las Guerras Médicas. Las reformas constitucionales que emprendió fueron consecuencia de la transformación de la estructura social: los nobles, cuya influencia política descansaba sobre la propiedad territorial, pasaron a un segundo plano, mientras que la clase media, constituida por marinos, comerciantes y artesanos, se convirtió en una clase privilegiada, que obtuvo la dirección política de la ciudad.[cita requerida]
En la esfera de relaciones internacionales, Pericles se encontró ante dos problemas: el de acabar definitivamente el conflicto con Persia, que persistía en sus ataques a las colonias griegas de Asia Menor, y el de convivir con Esparta. En cuanto al primero de ellos, Pericles logró establecer con los persas un armisticio beneficioso (Paz de Calias en 449 a. C.). Respecto al segundo problema, en 446 a. C. concertó una paz de treinta años con Esparta, por lo que esta ciudad reconocía la Liga de Delos; en compensación, Atenas renunciaba a la hegemonía terrestre, evacuando sus posiciones en el Peloponeso y en el Istmo.[cita requerida]
Guerra del Peloponeso
Artículo principal: Guerra del Peloponeso
El siglo pre Alejandrino
Las ciudades griegas sometidas antes a Atenas vieron que la tiranía impuesta ahora por Esparta resultaba más dura. Por ello, en 403 a. C. estalló un alzamiento general, que derrocó el régimen de los Treinta Tiranos y restableció la democracia en Atenas. El movimiento anti Espartano era capitaneado por Tebas, que contaba con el apoyo de Atenas, Argos y Corinto (Guerra de Corinto, 394 a. C. a 387 a. C.). Pese a que los aliados fueron derrotados en la batalla terrestre de Coronea (394 a. C.), la decisión estratégica de la lucha se solventó en el mar, donde aquellos destruyeron la flota espartana en Cnido (394 a. C.). Esparta, que veía peligrar su hegemonía, pidió ayuda a los persas, y la intervención de éstos obligó a los aliados a aceptar la Paz de Antálcidas (386 a. C.). A consecuencia de esta paz, Persia se anexó las colonias griegas de Asia Menor y cerró a Atenas toda posibilidad de rehacer su antiguo Imperio marítimo, mientras que reconocía a Esparta su papel de rectora de la Liga del Peloponeso. De hecho, este tratado impuesto atestiguaba la debilidad política del mundo griego, que se sometía a las directrices persas.
Más tarde Esparta pretendió imponer gobiernos oligárquicos en diversos estados, lo que provocó un nuevo levantamiento de Tebas, que esta vez fue coronado con el éxito. Persia, a causa de sus problemas interiores, no pudo acudir en auxilio de los espartanos, los cuales fueron derrotados en Leuctra y, definitivamente, en Mantinea (362 a. C.).
Dominación macedónica y Helenismo
Filipo V de Macedonia, «el cielo de Hellas», llevando la diadema real.
Macedonia
La segunda parte del siglo IV a. C. supone la preponderancia del reino Macedonio en Grecia. Su rey, Filipo II, sentía gran admiración por la cultura griega, por lo que decidió unificar a las polis griegas y terminar con las luchas internas. Filipo se caracterizó por establecer relaciones amistosas con Atenas. Pero Demóstenes, un famoso orador y político ateniense, no simpatizaba con las ideas de Filipo, por lo que formó una alianza con Tebas para derrotarle. Atenas y Tebas, por tanto, se enfrentaron a Macedonia en la Batalla de Queronea, que terminó con la derrota de la liga tebano-ateniense. Filipo se convenció de que la única manera de tener controlada a Atenas era usando la diplomacia, por lo que envió a su hijo Alejandro a acordar un tratado de paz. En el año 338 a. C., Filipo convocó un congreso en Corinto, al cual fueron todos las ciudades-estado griegas, a excepción de Esparta. Allí se creó la Liga Panhelénica (también conocida como «Liga de Corinto»). Hubo un segundo congreso al año siguiente, en el cual se declaró la guerra a Persia. Antes de poder llevar a cabo la expedición, Filipo es asesinado en el año 336 a. C. Al morir Filipo, sube al trono de Macedonia su hijo, Alejandro III, el futuro Alejandro Magno.
Alejandro Magno
Artículo principal: Alejandro Magno
El fin de la era Helenística
La restaurada Stoa de Atalo, Atenas.
El helenismo se extendió desde la fundación de los reinos de los diádocos a finales del siglo IV hasta su decadencia a finales del siglo I a. C. Dicha decadencia puede explicarse por cinco hechos principales:
El prolongado y suicida conflicto entre los Lagitas y Seleucidas que debilitó los recursos de ambos.
El enfrentamiento prolongado entre los Antigónidas y las ciudades-estado griegas que desgastaron a ambos.
La fragmentación del imperio Seleucida, que generó otros dos grandes reinos independientes y rivales: el de Pérgamo y el de la Bactria. Dicha fragmentación acabó por debilitar a los Seleucidas.
El resurgimiento de las fuerzas persas, que mantuvieron una lucha contra los Seleucidas, y también la lucha con Roma, que agotó sus recursos hasta su decadencia final.
La falta de un mínimo de sentido de cohesión frente a los romanos. Algunos de sus estados se pusieron de parte de Roma en vez de llegar a un acuerdo entre ellas mismas, lo que inclinó la balanza a favor de Roma. En el 148 a. C. Macedonia y Grecia finalmente pasan a ser parte del Imperio Romano y esto demarca el fin de la época griega.
Emperatriz Teodora y su cortejo (mosaico de la Basílica de San Vital), siglo VI.
Dominación romana
Artículo principal: Grecia Romana
Desde mediados del siglo II a. C. Grecia se convirtió, de hecho, en un protectorado Romano, y la mayoría de las ciudades griegas pagaron tributo a Roma. En 88 a. C., con el apoyo de Mitrídates, rey del Ponto, los griegos se sublevaron contra Roma, pero el levantamiento fracasó. Durante la época de las guerras civiles Grecia fue escenario de las luchas entre las distintas facciones romanas que querían hacerse con el poder. En la época Imperial se mantuvo la influencia cultural griega, pero los núcleos de expansión económica de Oriente se polarizaron en las provincias romanas de Asia. Éste período de relativa prosperidad fue interrumpido en el siglo III por las invasiones de los bárbaros. Paralelamente, la sociedad griega evolucionó hacia formas sociales y económicas de tipo feudal.
Grecia medieval
Iglesia Bizantina en el Ágora, Atenas.
Incorporación de Grecia en el Imperio bizantino
Desde la división del Imperio entre Arcadio y Honorio (395), Grecia formó parte del Imperio Romano de Oriente o Imperio Bizantino, cuya base cultural fue helénica. Las invasiones de pueblos germánicos y eslavos modificaron la composición étnica de la población. Numerosos pueblos eslavos se establecieron en las zonas montañosas, mientras que los griegos se refugiaron en las costas y en las islas. Estos eslavos fueron lentamente helenizados.
En el siglo VII los árabes se apoderaron de Chipre y Rodas. En el siglo X los emperadores lograron detener el avance de los árabes por el sur, y el de los búlgaros por el norte. Desde finales del siglo XI hasta mediados del siglo XII, los normandos saquearon varias veces las costas.
Estas invasiones favorecieron la formación de una sociedad de tipo feudal. Los emperadores, para hacerles frente, pidieron ayuda a la República de Venecia, a cambio de la concesión de una serie de ventajas comerciales. Durante la Tercera Cruzada, Chipre fue conquistada por Ricardo Corazón de León. En la Cuarta Cruzada se fundó el Imperio Latino de Oriente (1204–61) y Grecia fue dividida en una serie de principados controlados por nobles francos.
Las luchas entre francos y bizantinos fueron aprovechadas en los siglos XIII y XIV por Venecia y Génova, que se apoderaron de varias islas griegas. La división entre los principados francos favoreció a la aristocracia bizantina, que poco a poco fue recuperando la mayor parte del territorio griego. En el curso del siglo XV, Grecia cayó bajo el dominio otomano.
Situado en el lado sur de la Península Balcánica, limita con Bulgaria, la Antigua República Yugoslava de Macedonia y Albania al norte, al este con Turquía y al oeste y sur con el Jónico y el Mediterráneo.
Etimología
Grecia: proveniente del término latino graecus (Γραικοί), forma como Aristóteles se refería al nombre del país. En realidad el nombre está relacionado con el de la gente de Epiro. Otro nombre que recibe está relacionado al término de Alejandro Magno, “Helénico”, que proviene de Ellada (Ελλάδα) y que significa ‘tierra ligera’. También se relacionó al país griego con helios (sol). La raíz de donde se formó realmente su nombre no es muy certera, pero es en el Imperio romano donde comienzan a llamarle Grecia.
Historia
Artículo principal: Historia de Grecia
Lugares y Pueblos
La civilización griega se extendió hasta las islas del mar Egeo, la costa oriental del Egeo, las costas meridionales en torno de los mares Adriático y Tirreno y muchos sitios costeros alrededor de toda la cuenca mediterránea. Luego con las conquistas de Alejandro Magno se extenderían hacia el Oriente. Grecia es una civilización secundaria del segundo grado, surgió en curso de la época de las tinieblas griegas que abarcan desde el desastre de la cultura micénica (siglos XII a [[siglo XI a. C. XI a. C.). Grecia estaba compuesta por varias culturas como los Jonios, Dorios y Eolios.
Civilización Minoica
Es la primera civilización del mundo griego que florecía en la isla de Creta. Sus habitantes se establecieron hacia el año 6000 a. C. y alcanzaron el máximo de esplendor entre el año 2000 y el 1450 a. C. Contaban con una abundante riqueza la cual provenía del comercio con otras ciudades de la edad de bronce. También esta riqueza provenía de fértil suelo de Creta que producía aceites, cereales y vino en abundancia. Toda esta economía se centraba en los ricos palacios. Estos palacios se caracterizaban por estar decorados con escenas pintadas llamadas «frescos», todos estos palacios se construyeron cerca del mar, los restos de los lujosos edificios evidenciaban la técnica de los minoicos.
Civilización Micénica
Grecia disponía en la Edad de Bronce de centros importantes entre ellos Micenas. El rey vivía en grandes palacios con que desempeñaban el papel de cuartel general militar y centro administrativo. El pueblo micénico se caracterizó por su maestría en el comercio marítimo. Alcanzaron su cenit sobre el año 1600 a. C., y poco a poco fueron decayendo hasta la invasión de los aqueos.
Civilización Griega
No es fácil delimitar la civilización griega ni en cuanto a espacio ni en tiempo. El desarrollo de la cultura griega se podría dividir en tres fases: la Arcaica, la Clásica y la Helenística. En este curso histórico surgieron varios hechos importantes y fundamentales en la formación definitiva de lo que fue Grecia posteriormente: la formación de las dos polis (ciudades), el siglo V, la Edad Ateniense, las guerras como Médicas o la del Peloponeso (cinco años después de la cual se trataron de modificar las ciudades estados), La preeminencia de Macedonia (con Filipo II y su hijo, Alejandro Magno) y la extensión por Asia del mundo helenístico. La dominación romana en el siglo II a. C. pondría punto final a la civilización Griega políticamente, pero dejaría una impronta indeleble en sus invasores a través de los siglos.
Síntesis histórica
«De la época de las tinieblas a las polis». Esta época corresponde al surgimiento de Grecia como civilización (siglo XI al siglo IX a. C.), en el curso del siglo X se produjo un proceso de urbanización en el cual se trataba de agrupar varias aldeas hasta llegar a formar ciudades como Esparta y Atenas. La organización interna socio-política de estas primitivas polis estaba dominada por las tribus Ethnos (junto a los hogares clanes y fraternidades). Estas ciudades estado eran gobernadas por reyes que ejercían la autoridad religiosa, militar y política, excepto Esparta ya que hasta cierto grado la autoridad de los reyes empezó a ser reemplazada por una autoridad aristocrática formada por terratenientes que podían criar mantener y montar sus caballos. Otros dos factores que formaron un papel fundamental en la formación de la civilización griega fueron la institución de los juegos panhelénicos como los juegos olímpicos, comenzados en los años 776 a. C. los cuales subrayan los rasgos comunes de los griegos y las dos epopeyas de Homero probablemente compuesta en el siglo VIII a. C. El siglo VIII a. C. fue un periodo revolucionario para la formación de la civilización griega ya que asistimos a la introducción del alfabeto fenicio y su adaptación a la lengua griega, se mejoraron también la metalurgia del hierro y las técnicas agrícolas; esto produjo como resultado el aumento de la población lo cual genero necesidades como la fundación de colonias. Estas colonias enviaban metales y alimentos a sus metrópolis e importaban a cambio productos ya terminados. Esta prosperidad comercial, entre otros factores, condujo a la rápida fundación de las ciudades estado griegas por la costa del Egeo y sus islas (a finales de ese siglo ya había más de 700 ciudades-estado).Ésta riqueza avivó cada vez más las ansias de independencia política de las colonias respecto a sus metrópolis, no siempre por la vía pacífica lo que originó la creación de ejércitos y técnicas militares perfeccionadas como la infantería pesada (los hoplitas), que reemplazaron a los anteriores ejércitos de caballería. A modo general puede decirse que en los siglos VIII al VI a. C., las polis griegas experimentaron una transición de un sistema de gobierno monárquico a uno aristocrático. En el curso de las crisis sociales de los siglos VII y VI a. C. pasaron por una serie de gobiernos dictatoriales (los tiranos) hasta llegar finalmente a unos gobiernos democráticos. Esparta siguió un curso distinto por que conservo su doble monarquía, y después de la segunda guerra desarrolló una organización militar que llego a caracterizarlo a futuro.
Período prehelénico
Guerras Médicas
Artículo principal: Guerras Médicas
Entre los años 499 al 478 a. C., Grecia se enfrentó a una gran amenaza, los persas. Durante mucho tiempo Persia fue una amenaza principalmente en los territorios del Asia Menor, estas guerras transcurrieron bajo dos reinados persas, el de Darío I y el de Jerjes (hijo de éste). Esta guerra se desarrolló en dos partes, teniendo como resultado la victoria de las polis griegas, gracias en parte a sus desarrollados navíos:
La Primera Guerra Médica, en la que tuvo lugar la Batalla de Maratón.
La Segunda Guerra Médica, en la que acontecieron la Batalla de las Termo pilas y la de Salamina.
La Confederación Ateniense y el Siglo de Pericles
Artículo principal: Siglo de Pericles
Para proseguir la lucha marítima contra el Imperio persa, Atenas organizó la Confederación Ateniense o Liga de Delos (477 a. C.), y a partir de entonces dominó el comercio marítimo del mundo colonial griego. Atenas se convirtió además en un centro político e intelectual, cuyo período de mayor esplendor correspondió al gobierno de Pericles, fundamentalmente desde 462 a. C. hasta 429 a. C., en el que su influencia política se dejó sentir con intensidad. En política interior, Pericles modificó las leyes, dándoles un sentido más democrático, estableció la retribución de los cargos públicos y reconstruyó la ciudad, muy dañada a consecuencia de las Guerras Médicas. Las reformas constitucionales que emprendió fueron consecuencia de la transformación de la estructura social: los nobles, cuya influencia política descansaba sobre la propiedad territorial, pasaron a un segundo plano, mientras que la clase media, constituida por marinos, comerciantes y artesanos, se convirtió en una clase privilegiada, que obtuvo la dirección política de la ciudad.[cita requerida]
En la esfera de relaciones internacionales, Pericles se encontró ante dos problemas: el de acabar definitivamente el conflicto con Persia, que persistía en sus ataques a las colonias griegas de Asia Menor, y el de convivir con Esparta. En cuanto al primero de ellos, Pericles logró establecer con los persas un armisticio beneficioso (Paz de Calias en 449 a. C.). Respecto al segundo problema, en 446 a. C. concertó una paz de treinta años con Esparta, por lo que esta ciudad reconocía la Liga de Delos; en compensación, Atenas renunciaba a la hegemonía terrestre, evacuando sus posiciones en el Peloponeso y en el Istmo.[cita requerida]
Guerra del Peloponeso
Artículo principal: Guerra del Peloponeso
El siglo pre Alejandrino
Las ciudades griegas sometidas antes a Atenas vieron que la tiranía impuesta ahora por Esparta resultaba más dura. Por ello, en 403 a. C. estalló un alzamiento general, que derrocó el régimen de los Treinta Tiranos y restableció la democracia en Atenas. El movimiento anti Espartano era capitaneado por Tebas, que contaba con el apoyo de Atenas, Argos y Corinto (Guerra de Corinto, 394 a. C. a 387 a. C.). Pese a que los aliados fueron derrotados en la batalla terrestre de Coronea (394 a. C.), la decisión estratégica de la lucha se solventó en el mar, donde aquellos destruyeron la flota espartana en Cnido (394 a. C.). Esparta, que veía peligrar su hegemonía, pidió ayuda a los persas, y la intervención de éstos obligó a los aliados a aceptar la Paz de Antálcidas (386 a. C.). A consecuencia de esta paz, Persia se anexó las colonias griegas de Asia Menor y cerró a Atenas toda posibilidad de rehacer su antiguo Imperio marítimo, mientras que reconocía a Esparta su papel de rectora de la Liga del Peloponeso. De hecho, este tratado impuesto atestiguaba la debilidad política del mundo griego, que se sometía a las directrices persas.
Más tarde Esparta pretendió imponer gobiernos oligárquicos en diversos estados, lo que provocó un nuevo levantamiento de Tebas, que esta vez fue coronado con el éxito. Persia, a causa de sus problemas interiores, no pudo acudir en auxilio de los espartanos, los cuales fueron derrotados en Leuctra y, definitivamente, en Mantinea (362 a. C.).
Dominación macedónica y Helenismo
Filipo V de Macedonia, «el cielo de Hellas», llevando la diadema real.
Macedonia
La segunda parte del siglo IV a. C. supone la preponderancia del reino Macedonio en Grecia. Su rey, Filipo II, sentía gran admiración por la cultura griega, por lo que decidió unificar a las polis griegas y terminar con las luchas internas. Filipo se caracterizó por establecer relaciones amistosas con Atenas. Pero Demóstenes, un famoso orador y político ateniense, no simpatizaba con las ideas de Filipo, por lo que formó una alianza con Tebas para derrotarle. Atenas y Tebas, por tanto, se enfrentaron a Macedonia en la Batalla de Queronea, que terminó con la derrota de la liga tebano-ateniense. Filipo se convenció de que la única manera de tener controlada a Atenas era usando la diplomacia, por lo que envió a su hijo Alejandro a acordar un tratado de paz. En el año 338 a. C., Filipo convocó un congreso en Corinto, al cual fueron todos las ciudades-estado griegas, a excepción de Esparta. Allí se creó la Liga Panhelénica (también conocida como «Liga de Corinto»). Hubo un segundo congreso al año siguiente, en el cual se declaró la guerra a Persia. Antes de poder llevar a cabo la expedición, Filipo es asesinado en el año 336 a. C. Al morir Filipo, sube al trono de Macedonia su hijo, Alejandro III, el futuro Alejandro Magno.
Alejandro Magno
Artículo principal: Alejandro Magno
El fin de la era Helenística
La restaurada Stoa de Atalo, Atenas.
El helenismo se extendió desde la fundación de los reinos de los diádocos a finales del siglo IV hasta su decadencia a finales del siglo I a. C. Dicha decadencia puede explicarse por cinco hechos principales:
El prolongado y suicida conflicto entre los Lagitas y Seleucidas que debilitó los recursos de ambos.
El enfrentamiento prolongado entre los Antigónidas y las ciudades-estado griegas que desgastaron a ambos.
La fragmentación del imperio Seleucida, que generó otros dos grandes reinos independientes y rivales: el de Pérgamo y el de la Bactria. Dicha fragmentación acabó por debilitar a los Seleucidas.
El resurgimiento de las fuerzas persas, que mantuvieron una lucha contra los Seleucidas, y también la lucha con Roma, que agotó sus recursos hasta su decadencia final.
La falta de un mínimo de sentido de cohesión frente a los romanos. Algunos de sus estados se pusieron de parte de Roma en vez de llegar a un acuerdo entre ellas mismas, lo que inclinó la balanza a favor de Roma. En el 148 a. C. Macedonia y Grecia finalmente pasan a ser parte del Imperio Romano y esto demarca el fin de la época griega.
Emperatriz Teodora y su cortejo (mosaico de la Basílica de San Vital), siglo VI.
Dominación romana
Artículo principal: Grecia Romana
Desde mediados del siglo II a. C. Grecia se convirtió, de hecho, en un protectorado Romano, y la mayoría de las ciudades griegas pagaron tributo a Roma. En 88 a. C., con el apoyo de Mitrídates, rey del Ponto, los griegos se sublevaron contra Roma, pero el levantamiento fracasó. Durante la época de las guerras civiles Grecia fue escenario de las luchas entre las distintas facciones romanas que querían hacerse con el poder. En la época Imperial se mantuvo la influencia cultural griega, pero los núcleos de expansión económica de Oriente se polarizaron en las provincias romanas de Asia. Éste período de relativa prosperidad fue interrumpido en el siglo III por las invasiones de los bárbaros. Paralelamente, la sociedad griega evolucionó hacia formas sociales y económicas de tipo feudal.
Grecia medieval
Iglesia Bizantina en el Ágora, Atenas.
Incorporación de Grecia en el Imperio bizantino
Desde la división del Imperio entre Arcadio y Honorio (395), Grecia formó parte del Imperio Romano de Oriente o Imperio Bizantino, cuya base cultural fue helénica. Las invasiones de pueblos germánicos y eslavos modificaron la composición étnica de la población. Numerosos pueblos eslavos se establecieron en las zonas montañosas, mientras que los griegos se refugiaron en las costas y en las islas. Estos eslavos fueron lentamente helenizados.
En el siglo VII los árabes se apoderaron de Chipre y Rodas. En el siglo X los emperadores lograron detener el avance de los árabes por el sur, y el de los búlgaros por el norte. Desde finales del siglo XI hasta mediados del siglo XII, los normandos saquearon varias veces las costas.
Estas invasiones favorecieron la formación de una sociedad de tipo feudal. Los emperadores, para hacerles frente, pidieron ayuda a la República de Venecia, a cambio de la concesión de una serie de ventajas comerciales. Durante la Tercera Cruzada, Chipre fue conquistada por Ricardo Corazón de León. En la Cuarta Cruzada se fundó el Imperio Latino de Oriente (1204–61) y Grecia fue dividida en una serie de principados controlados por nobles francos.
Las luchas entre francos y bizantinos fueron aprovechadas en los siglos XIII y XIV por Venecia y Génova, que se apoderaron de varias islas griegas. La división entre los principados francos favoreció a la aristocracia bizantina, que poco a poco fue recuperando la mayor parte del territorio griego. En el curso del siglo XV, Grecia cayó bajo el dominio otomano.
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